La vida útil de un SSD es uno de los aspectos fundamentales que debes tener en cuenta a la hora de adquirir este tipo de almacenamiento. A diferencia de los discos duros tradicionales, estos incorporan memoria flash para guardar datos y mejorar la velocidad.
Aunque hasta ahora es la tecnología más avanzada en el ámbito de almacenamiento, su tiempo de uso puede reducirse como cualquier otro componente de PC. Todo va de la mano con la calidad del SSD y la manera en la que lo utilices.
Por ello, es vital conocer las mejores prácticas para utilizar un SSD, pues estas no solo ayudarán a conservar el hardware, sino que también mejorarán la experiencia general en el ordenador. Pues bien, en este artículo vas a conseguir los puntos clave para determinar la longevidad que tiene tu disco duro.
La vida útil de un SSD no es algo de lo que tengas que preocuparte. Durante el lanzamiento de los primeros modelos se pensaba que eran más propensos a fallar que los HDD. Sin embargo, los avances tecnológicos y las diversas investigaciones han desafiado esta idea.
Según un estudio realizado por la empresa Blackbaze, la cual se enfoca principalmente en el almacenamiento a la nube, se ha confirmado que tanto los SSD como los HDD cuentan con una tasa de fallo muy similar.
En los primeros 3 años, ambos tenían un funcionamiento similar, pero solo un detalle fue el que los diferenció. Para ser más específicos, el HDD se disparaba constantemente a medida que pasaba el tiempo, mientras que los SSD se mantenían estables hasta con 5 años de uso.
Los servidores avanzados de Backblaze forzaron a los SSD y HDD a dar el máximo durante dicho periodo de tiempo e incluso más. De esta manera, fue como llegaron a la conclusión de que la vida útil de un SSD excede con creces la de un equipo informático.
Por lo tanto, es más probable que decidas actualizar tu computadora antes de que tu SSD falle por cuestiones de longevidad.
Que un SSD sea confiable durante muchos años de uso no quiere decir que siempre será así. A lo largo del tiempo, es posible que se presenten ciertos problemas u obstáculos que le impidan realizar un trabajo óptimo.
Lo cierto es que existen varios aspectos que influyen negativamente en el desenvolvimiento de un disco duro. Hábitos como el almacenamiento excesivo o la negligencia en el mantenimiento pueden reducir la vida útil de manera significativa.
Esos son solo algunos de los motivos, aunque también deberías considerar los siguientes factores para que no se vea afectado por el desgaste:
Básicamente, estos serían los aspectos que pueden causar inestabilidad en tu SSD. La idea es que siempre que pienses en comprar algún disco duro nuevo, tengas presente cada uno de los factores mencionados. Así podrás prevenir futuros problemas y mantener la vida útil intacta.
Aprender a cuidar adecuadamente tu SSD no solo es una cuestión de rendimiento, sino también de asegurarte de que tu valiosa información permanezca segura.
Aunque las condiciones también dependen de la calidad del componente, tener en cuenta algunas recomendaciones para que su funcionamiento se mantenga como el primer día no está de más.
Entre algunas de las acciones que puedes realizar, estas son las que destacan por su efectividad:
Si usas correctamente tu disco duro y consideras toda la información que has visto hasta ahora, entonces no tienes de qué preocuparte. La confiabilidad de los SSD es comparable a la de los HDD, especialmente en situaciones de uso normal.
Después de todo, lo mejor que puedes hacer es evitar que tu PC se sobrecaliente e impedir que tu SSD reciba daños graves.